Posturología: definición y ventajas en el tratamiento de determinadas patologías

En este artículo escrito por Charlotte Rieu , osteópata D.O. y practicante de Allyane, le invitamos a descubrir qué es la posturología, qué patologías pueden conducir a un déficit postural y qué puede aportar el método Allyane a la gestión de las patologías de la columna vertebral que pueden estar vinculadas a ella. 

Posturología: definición

La posturología es un método de diagnóstico utilizado para reducir el asincronismo de los sensores posturales. En otras palabras, permite tratar ciertas patologías haciéndose cargo del equilibrio postural del paciente.

Este método multidisciplinar reúne a varios profesionales de la salud, como osteópatas, podólogos, dentistas, fisioterapeutas, ortopedas y médicos. El objetivo es conseguir una postura más económica y un patrón motor optimizado en el sujeto en cuestión.

¿Cuáles son los beneficios de la posturología?

Como acabamos de mencionar, la posturología no pretende tratar ninguna dolencia. Es, ante todo, una herramienta de diagnóstico que puede ayudar a diversos profesionales de la salud a detectar la presencia de determinadas patologías en sus pacientes. Sus beneficios ya se han demostrado en algunos casos muy concretos.

Obtener datos adicionales para determinar la vía de atención óptima

En el contexto de determinados trastornos médicos, la posturología puede aportar datos especialmente interesantes para los profesionales de la salud. Es el caso, en particular, de los trastornos del equilibrio relacionados con disfunciones del oído interno (trastornos vestibulares), algunos de cuyos parámetros pueden revelarse mediante la posturología.

Uso de la posturología para mejorar la evaluación del control postural

La posturología también puede ser muy útil para evaluar el control postural de un paciente, sobre todo como complemento de las demás pruebas que suelen realizarse para detectar este trastorno. Los beneficios de la posturología en el tratamiento de los trastornos del equilibrio y la postura causados por la enfermedad de Parkinson, la epilepsia o los accidentes cerebrovasculares, por ejemplo, ya han sido demostrados por numerosos estudios científicos.

¿Qué enfermedades pueden estar relacionadas con una mala postura?

El desequilibrio postural puede provocar diversas patologías. Por ejemplo

  • lumbalgia recurrente y ciática;
  • hernias discales ;
  • dolor de cuello y espalda ;
  • tendinopatías ;
  • hipertonía muscular ;
  • escoliosis;
  • Síndrome de deficiencia postural (SDP);
  • fascitis plantar ;
  • gonalgia (síndromes rotulianos) ;
  • lesiones musculares recurrentes ;
  • flessums ;
  • esguinces y tendinopatías recurrentes, etc.

Causas de la patología postural

Las patologías posturales pueden tener distintos orígenes. Aunque todos sufrimos sensores posturales asincrónicos (asimetría mandibular o asimetría del apoyo plantar, por ejemplo), algunos somos capaces de compensar estos defectos innatos sin la menor dificultad, mientras que otros pueden desarrollar ciertas patologías que pueden desembocar en dolores crónicos.

Sin embargo, hay una serie de factores que también pueden influir en el desarrollo de un defecto postural. Entre ellos cabe citar

  • posturas corporales incorrectas prolongadas y repetidas;
  • ciertos tipos de traumatismos ;
  • ciertas secuelas posquirúrgicas.

Manejo de pacientes en posturología clínica

En el marco del tratamiento de los trastornos posturales, los distintos profesionales sanitarios formados en posturología realizan un primer examen clínico (en particular, con la vertical de Barré). A continuación, se comprueban los sensores posturales (que son 6: los ojos, la columna vertebral, el oído interno, los pies, las articulaciones temporomandibulares y la piel). Una vez realizada la evaluación postural, los distintos terapeutas definidos anteriormente podrán tratar al paciente.

El tratamiento de una patología postural pretende entonces neutralizar el asincronismo de los sensores responsables del desequilibrio, con el fin de inducir una postura más económica (es decir, menos restrictiva) y optimizar el patrón motor. La estabilización del sistema postural y el tono muscular también pueden optimizarse mediante la reprogramación neuromotora.

El método de reprogramación neuromotora Allyane y la posturología

El método de reprogramación neuromotora Allyane utiliza una combinación de trabajo propioceptivo, imaginería motriz y sonidos de baja frecuencia para actuar sobre el origen del movimiento y crear un nuevo automatismo motor.

Tras un traumatismo (motor o mental), una intervención quirúrgica o una patología neurológica (ictus, esclerosis múltiple, etc.), se ponen en marcha cambios posturales. El cerebro crea inhibiciones motoras que impiden que los músculos funcionen correctamente, ya sea en cuanto a su fuerza, a la calidad del movimiento a realizar y/o compensando otros músculos que a menudo son antagonistas de la acción a realizar.

La combinación del método Allyane y la posturología permite tratar a los pacientes de forma multidisciplinar. Además, este tratamiento es tan eficaz para la prevención como para la corrección o la adquisición de nuevos automatismos motores.

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